El actor Val Kilmer, conocido por sus papeles icónicos como Bruce Wayne en Batman Forever y Jim Morrison en The Doors, falleció a los 65 años. La noticia de su muerte generó una gran conmoción entre fanáticos y colegas de la industria del entretenimiento, quienes le rindieron emotivos homenajes en las redes sociales.
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Su hija Mercedes declaró al New York Times que la causa fue una neumonía. Tenía 65 años. Luchaba desde hace varios años contra un cáncer de garganta.
Con una carrera que abarcó varias décadas, Kilmer se destacó en producciones que marcaron a generaciones enteras. Entre sus papeles más memorables están el piloto de combate Iceman en Top Gun (1986), el legendario pistolero Doc Holliday en Tombstone (1993), el espía encubierto en The Saint (1997) y el excéntrico científico en La isla del Dr. Moreau (1996). También brilló en películas como Willow (1988), Thunderheart (1992) y Heat (1995), donde compartió pantalla con Al Pacino y Robert De Niro.
Además de su talento transformador en papeles dramáticos y de acción, Kilmer era reconocido por su compromiso con cada personaje, entregándose por completo a cada interpretación — una dedicación que le valió respeto y admiración en el mundo artístico.
En redes sociales, tanto admiradores como profesionales del cine destacaron no solo su carisma y presencia en pantalla, sino también su contribución duradera al arte y a la cultura pop.
Val Kilmer deja un legado de grandes interpretaciones y será recordado como uno de los rostros más destacados y versátiles del cine moderno.
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